Mensaje de la presidente de la CSJ en el Día Internacional de la Mujer.

Nos sumamos  hoy  a la celebración del Día Internacional de la Mujer, reconociendo los aportes significativos que todas y cada una de las mujeres hacemos en todos los ámbitos de nuestra sociedad, haciendo uso de nuestros talentos y entusiasmo en la construcción de un mundo mejor y cada vez más equitativo.

Celebramos el día de hoy el vivir en un país  que camina hacia la igualdad, eliminando las brechas sociales y culturales, gracias a la Política de Desarrollo Humano, que en estos 10 años ha impulsado el Presidente Daniel  Ortega y la Cra. Rosario Murillo, convirtiendo a las mujeres, como nunca antes en la historia,  en protagonistas de las transformaciones, del presente y del futuro.

Reconocemos   a juezas, magistradas, secretarias, notificadoras, defensoras públicas, médicas legales y psicólogas forenses, que en todo el territorio nacional trabajan  día a día administrando justicia sin discriminación, restituyendo los derechos de las mujeres nicaragüenses y brindando un servicio con calidad y calidez.

Un saludo afectuoso  a las mujeres Diputadas, Ministras, Viceministras y la Vicepresidenta del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional,  a quien les ha correspondido llevar adelante la Política de Igualdad e Inclusión para las mujeres, reconociendo que las mujeres son sujetas de cambio y protagonistas de las transformaciones del país.  

Mi especial reconocimiento a las miles de mujeres nicaragüenses que en el campo y la ciudad, desde  una infinidad de oficios y profesiones  se comprometen con Nicaragua y se esfuerzan por dar lo mejor de sí para tener una Nicaragua mejor cada día, para seguir siendo un referente a nivel Mundial en materia de participación de la mujer y disminución de la brecha de género. 

La Corte Suprema de Justicia seguirá especializando a sus funcionarios y funcionarias, seguirá apostándole a las transformaciones organizacionales pues estamos convencidos que es en nuestros puestos de trabajo, en actos cotidianos aparentemente minúsculos pero que a la postre son monumentales, donde deben seguirse generando los cambios y desmontando los paradigmas e ideas patriarcales para la reivindicación de  los derechos de las mujeres nicaragüense.

Este día es una excelente oportunidad también para que hombres y mujeres reafirmemos nuestro compromiso de seguir construyendo cotidianamente, un mundo digno e inclusivo para todas y todos, donde la igualdad y no discriminación sea la base para reconocer que somos  sociedades diversas y que cada persona merece ser tratada con respeto y dignidad.